La Evolución del Lifting: Los Avances en las Técnicas y Procedimientos desde sus comienzos

Desde los primeros procedimientos realizados en 1901 hasta la actualidad, las técnicas y procedimientos han avanzado de forma notable tanto en resultados como en permanencia en el tiempo.

Desde que el hombre tomara constancia de su aspecto físico siempre ha existido una preocupación por el paso del tiempo y su consecuencia más directa, el envejecimiento. Sobre todo en el área corporal más visible: El rostro. El Lifting, denominado técnicamente Ritidectomía, ha sido, desde sus comienzos, una solución ante el deterioro facial, considerándose una de las operaciones más delicadas y minuciosas dentro la Cirugía Plástica y Estética.

Las primeras aplicaciones de esta técnica quirúrgica de las que hay constancia se remontan a 1901 cuando el cirujano alemán Eugen Holländer realizó el primer Lifting facial a una aristócrata polaca. La paciente le entregó unas instrucciones muy precisas, a modo de dibujo, en las que retirando la piel delante de las orejas se conseguía un alisamiento de las comisuras de los labios y el surco nasolabial. La operación consistió en retirar pequeñas cantidades de piel en el nacimiento del cuero cabelludo y detrás de las orejas, los resultados fueron satisfactorios siendo Holländer pionero en esta cirugía, pero al no trabajar estructuras más profundas el resultado no fue el esperado por la paciente.

A pesar de haberse asentado las bases de esta técnica estética, en la época este tipo de cirugías eran consideradas superficiales y banales, siendo el cirujano plástico denostado y rechazado. Esta situación provocó que este tipo de intervenciones permanecieran en el anonimato.

Aun así, existe constancia de los avances de Lexer en 1906, que aportó mejorías a las técnicas ya conocidas. Este cirujano practicó despegamientos de mayor profundidad, hasta la capa muscular, e incisiones más largas.

Estos progresos en el Lifting los continuaron en 1921 Joseph y en 1926 Noël. Ambos siguieron practicando e innovando el proceso.

El primer artículo oficial sobre Ritidectomía fue publicado en 1950 en la Revista Americana de Cirugía Plástica.

Aunque no fue hasta los años 60 cuando se empezó a popularizar esta técnica. Unida a los avances en la anestesia junto con el interés del creciente mundo del cine, actores y famosos que buscaban esquivar el envejecimiento, el Lifting facial se convirtió en un procedimiento muy habitual y buscado.

Las técnicas son cada vez más elaboradas pasando de solo estirar la piel a nuevos procesos que limitan el extenso despegamiento cutáneo anterior, poniendo el énfasis del tratamiento en la tracción de los planos profundos musculares (SMAS y platisma), eliminando así la tensión sobre la piel.

El considerado fundador de estas nuevas técnicas es Tord Skoog, quien en 1974 realizó una elevación de los planos musculares de la cara y el cuello.

Esta operación dio lugar a la técnica estándar Lifting SMAS. Este procedimiento recibe el nombre por el Sistema Músculo Aponeurótico superficial, una lámina de tejido conectivo fibroso situada tras la capa de grasa facial.

Esta lámina separa las estructuras de mayor profundidad de la cara (músculos, nervios y otras estructuras) del tejido blando de la cara, dejando aisladas esas partes del rostro que no están tan afectadas por el proceso de envejecimiento.

A partir de ese momento, en los años posteriores y hasta final de siglo las mejoras fueron en aumento, mejor emplazamiento de las incisiones, mayor búsqueda de la naturalidad evitando la tensión de la piel y colocando la tracción en la dirección correcta, en este caso vertical como contrapunto a la gravedad. Un efecto que provoca naturalidad, al contrario que las técnicas tradicionales en las que la dirección era lateral, creando un efecto de máscara.

Aparecen también técnicas algo menos invasivas como endoscopias, la aplicación comienza a darse en pacientes más jóvenes, …

Consideramos que en las últimas siete décadas la evolución ha sido clave para crear procesos más sofisticados dado el amplio conocimiento que se ha desarrollado a nivel tanto anatómico como fisiológico.

El concepto de Lifting actual no solo se enfoca en todas las mejoras anteriormente descritas, sino también en nuevos detalles que se han ido descubriendo de la morfología humana como los compartimentos grasos de la cara o el proceso de envejecimiento en sí. Actualmente no solo se tiene en cuenta el emplazamiento de las incisiones, que buscan preservar la línea del pelo y que no se deba cambiar el peinado para ocultar posibles cicatrices, sino también la disección apropiada a nivel cutáneo y muscular y la reposición de los tejidos poniendo especial cuidado en los planos profundos, encargados de llevar la tensión hacia la dirección correcta.

El Doctor Rodríguez-Camps en su Clínica en Valencia realiza este tipo de intervenciones con un abordaje tridimensional poniendo atención en las estructuras más profundas (músculos), adaptando la piel de la cara y cuello y cuidando el volumen de grasa de ciertas áreas como la región malar, el surco lacrimal, las mejillas,…

Si el paciente lo requiere este tipo de procedimiento se completan con otras técnicas auxiliares como la elevación de cejas, el estiramiento de la frente, la liposucción de la papada, la extirpación de la grasa de los párpados y mejillas o remodelación de ciertas zonas como pómulos, mentón o nariz.

Como profesional de la Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva con más de 30 años de experiencia y a la cabeza de un gran equipo profesional en la Clínica Rodríguez-Camps, el Doctor atiende a sus pacientes de forma personalizada ofreciendo siempre su amplia experiencia para obtener unos resultados que se adapten a las necesidades estéticas del paciente.

En su página web podrás conocer algunos casos clínicos, con imágenes de antes y después tanto en Lifting facial como otras cirugías estéticas. También podrás descubrir su amplia carrera tanto profesional como meritoria, su filosofía de trabajo o los diferentes procedimientos que se realizan en su Clínica.